Uno de los informes más esperados del año

El AI Index Report 2025 de Stanford, uno de los informes más esperados del año que ofrece un análisis completo del estado actual de la IA a nivel global.

Juan Luis Pascual Abad

4/16/20253 min read

Ya está aquí el AI Index Report 2025 de Stanford, uno de los informes de IA más esperados del año. Este documento hace un análisis completo del estado actual de la IA en el mundo: avances, retos, oportunidades y todo lo que importa a futuro.

A continuación os presentamos un breve resumen con los principales puntos y al final podréis podréis descargar el informe completo.

La IA ya no quiere demostrar que puede: ya lo está haciendo

Durante años, la IA fue una promesa, una hipótesis, un sueño de laboratorio. Hoy es una herramienta tangible que empieza a superar a los humanos en tareas concretas. Los modelos más avanzados han mejorado espectacularmente su rendimiento en pruebas que antes se consideraban casi inalcanzables. En programación, por ejemplo, pasaron de resolver un 4% de problemas en 2023 a más del 70% en apenas un año.

Pero no solo se trata de benchmarks. La IA está saliendo del laboratorio y entrando con fuerza en nuestra vida cotidiana. Más de 150.000 trayectos semanales de coches autónomos ya circulan por Estados Unidos. La FDA ha aprobado 223 dispositivos médicos basados en IA, cuando hace una década apenas eran seis. No es ciencia ficción. Es el nuevo estándar​.

El gran negocio del siglo XXI

Las empresas ya lo saben. En 2024, el 78% de las organizaciones usaban IA, frente al 55% del año anterior. Y eso no es todo: la inversión privada en inteligencia artificial en EE. UU. alcanzó los 109.100 millones de dólares. Solo la IA generativa movilizó más de 33.900 millones, multiplicando casi por nueve las cifras de 2022​.

Detrás de este empuje no hay solo dinero: hay resultados. La IA está empezando a mostrar impactos financieros medibles en marketing, ventas y operaciones. Aunque los beneficios aún no son masivos, el camino ya está marcado.

China se acerca. Y rápido.

Estados Unidos mantiene el liderazgo global en modelos de IA, pero el margen se estrecha. Mientras los estadounidenses lanzaron 40 modelos notables en 2024, China lanzó 15… pero casi han alcanzado su rendimiento. Las diferencias en pruebas clave como MMLU y HumanEval se han reducido a márgenes inferiores al 4%, cuando hace apenas un año eran del 30%​.

Además, China lidera claramente en número de publicaciones y patentes. Y aunque el liderazgo intelectual aún pertenece a universidades estadounidenses, el músculo industrial chino avanza sin pausa.

Más potente. Más barata. Más accesible.

Uno de los datos más impactantes del informe es el de la reducción de costes. Ejecutar un modelo con rendimiento similar a GPT-3.5 costaba 20 dólares por millón de tokens en 2022. Hoy cuesta 0,07. Es decir, 280 veces menos​.

La eficiencia energética mejora un 40% cada año. Y los modelos pequeños empiezan a igualar en rendimiento a modelos que antes requerían cientos de miles de millones de parámetros. En resumen: la IA se democratiza.

¿Pero estamos preparados?

El boom tecnológico no ha venido sin consecuencias. En 2024 se registraron 233 incidentes relacionados con IA: desde deepfakes hasta sesgos algorítmicos. Muchos modelos siguen mostrando asociaciones implícitas sexistas o racistas, incluso cuando se entrenan para evitarlas​.

El sector privado reconoce los riesgos, pero las acciones siguen siendo lentas. Mientras tanto, los gobiernos se mueven. Se han duplicado las regulaciones en EE. UU., y países como Arabia Saudita, Francia o Canadá han lanzado ambiciosas iniciativas de inversión en infraestructuras de IA​.

Una sociedad dividida

A pesar de todo, la percepción pública está cambiando. En países como China, Indonesia o Tailandia, más del 75% de la población cree que la IA aportará más beneficios que perjuicios. En EE. UU. o Canadá, ese optimismo apenas supera el 39%. Aun así, incluso en los países más escépticos, la percepción mejora año tras año​.

Y mientras unos sueñan con coches autónomos y diagnósticos instantáneos, otros temen por sus empleos, la privacidad o la manipulación política.

¿Hacia dónde vamos?

El informe cierra con una advertencia: el rendimiento de los modelos empieza a converger. El diferencial entre el mejor y el décimo mejor modelo es ya del 5%. Esto implica dos cosas: la competencia se intensifica, y el margen para innovar se estrecha. La carrera está más abierta que nunca, pero también más exigente.

La IA ya no es una historia de lo que podría ser. Es una historia de lo que ya está siendo. Y la pregunta que debemos hacernos no es si cambiará el mundo, sino qué mundo queremos construir con ella.